El concepto de minerales críticos hace referencia a 34 elementos que consideramos fundamentales para conseguir el progreso tecnológico y la transición energética. Estos minerales, como el wolframio o el tántalo, son los protagonistas del número octavo de la revista divulgativa semestral CSIC INVESTIGA. El último ejemplar de la colección, que se ha presentado hoy en el Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC), muestra las investigaciones desarrolladas en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, para impulsar la exploración y la explotación, tanto en España como en Europa, de estos recursos fundamentales.
El evento ha contado con la participación de la presidenta del CSIC, Eloísa del Pino; y la directora del IGME, Rosa María Mateos. Tanto el público asistente como las personas que han seguido la presentación a través de streaming han podido disfrutar de los proyectos que la institución desarrollada para el reciclaje de estos minerales o la búsqueda de nuevas explotaciones gracias a las intervenciones de Concepción Fernández Leyva, investigadora del IGME-CSIC; María José Jurado, geóloga de Geociencias Barcelona (GEO3BCN-CSIC); Félix Antonio López, investigador del Centro Nacional de Investigaciones Metalúrgica (CENIM-CSIC); y Fernando Tornos, geólogo del Instituto de Geociencias (IGEO, CSIC-UCM). El debate ha sido moderado por el periodista Manuel Seara.
La presidenta del CSIC ha destacado la capacidad de la institución para abordar desde un enfoque multidisciplinar los retos geopolíticos y sociales que se esconden detrás de la belleza natural de estos minerales. “La mayor ventaja del CSIC con respecto a cualquier organización del mundo es precisamente contar con investigadores e investigadoras de diferentes ámbitos respecto a una materia. En este sentido, hemos desplegado herramientas como las Plataformas Temáticas Interdisciplinares (PTIs) y la Conexiones del CSIC que permiten desarrollar una colaboración multidisciplinar, no solo para los investigadores del Consejo, sino que está abierta a otros expertos y a las administraciones públicas”.
“Tenemos que aunar los esfuerzos, tanto en el ámbito público como en el privado, para impulsar la exploración y explotación de la minería; y así, una vez más, poner la ciencia al servicio de la sociedad”, ha añadido Rosa María Mateos.
Reciclado de minerales críticos
Producir coches eléctricos, aerogeneradores y paneles solares requiere minerales como el disprosio, neodimio o praseodimio, unos elementos muy escasos que se concentran en pocos países. Para hacer frente a esta necesidad, el CENIM-CSIc acogerá una planta piloto, única en Europa, para recuperar los metales de los residuos electrónicos y darles una segunda vida.
“Europa produce dos millones de toneladas al año en residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, lo que equivale a 16,2 kg por persona, la tasa más alta del mundo. Se calcula que el reciclado no llegaría a abastecer el 10% de nuestras necesidades, por ello es necesario el ecodiseño de los nuevos productos y avanzar en procesos de reciclado más eficaces”, señala Félix López.
Los minerales olvidados en los residuos mineros
Los investigadores e investigadoras participantes han destacado el papel histórico de la minería en España, que cuenta con un elevado número de presas, balsas y escombreras mineras distribuidas por toda su geografía e inventariadas por el Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC). Un número indeterminado de estos depósitos contienen aún cantidades significativas de minerales críticos que, dado el avance en las técnicas de procesamiento actuales, es posible recuperar.
“Es muy importante conocer nuestros recursos para hacer frente a esa imposibilidad de acceder rápidamente a estas materias. Para hacer un balance entre lo que tenemos y lo que nos llega del exterior, primero, es fundamental conocer los recursos de nuestro país”, destaca Concepción Fernández Leyva.
Las salmueras geotérmicas, una solución para obtener litio
El litio, conocido ya como el oro blanco, se ha convertido en uno de los metales más importantes a nivel industrial debido a su uso en baterías de teléfonos móviles, ordenadores y coches eléctricos. La extracción tradicional de este recurso implica la minería a cielo abierto o la explotación de salmueras geotérmicas; es decir, acumulaciones naturales de soluciones salinas que se encuentran sobre la superficie terrestre.

“Hemos descubierto que el fluido geotérmico, además del calor, también transporta litio y otros elementos que se pueden extraer”, explica María José Jurado, investigadora del GEO3BCN que ha participado en el proyecto europeo que busca localizar salmueras ricas en minerales críticos en Polonia, Hungría, República Checa, Eslovaquia, España y Portugal.
A la búsqueda de los minerales del futuro
En el contexto actual, en el que la Unión Europea busca combinar la obtención de materias primas en terceros países con políticas orientadas hacia el autoabastecimiento, el CSIC se sitúa entre las instituciones europeas más destacadas en la búsqueda de recursos minerales estratégicos para el futuro a través del estudio de mineralizaciones y en el desarrollo de tecnologías avanzadas de exploración.
“Llevamos más de 6.000 años de explotación minera, y aunque se asocia los minerales críticos a un enfoque alarmista por su creciente demanda y nuestra dependencia respecto a terceros países, lo cierto es que hay depósitos en otros lugares del mundo, más allá de los que posee China. Cuando seamos capaces de explotar esos recursos, casi nos reiremos de este problema. No debemos alarmar, sino plantear una visión de futuro”, remarca Fernando Tornos.
El debate ha concluido con la necesitar de realizar una mayor actividad de divulgación sobre la actividad minera para que las administraciones y la propia sociedad sean consciente de su necesidad.