El pasado 15 de enero el volcán submarino Hunga-Tonga-Hunga-Ha'apai entró en erupción provocando un tsunami en el océano Pacífico y una fuerte explosión, que ha sido detectada por distintos tipos de sensores en todo el planeta, incluyendo la península Ibérica, situada unos 17.000 km del punto origen.
De acuerdo con los datos de Jordi Díaz, investigador de Geociencias Barcelona (GEO3BCN-CSIC), las ondas infrasónicas generadas por la explosión de este volcán, situado en el sur del océano Pacífico, quedaron registradas en el sismómetro ubicado en el Laboratorio Subterráneo de Canfranc (LSC) en Huesca.
The complex #Infrasound waves generated by the #HungaTongaHungaHaapai explosion, as recorded at the 3 components of the @labsubcanfranc seismometer after travelling 17000 km . @GEO3BCN_CSIC pic.twitter.com/wPzgwOZUcm
— Jordi Diaz Cusi (@JDiazCusi) January 17, 2022
Los datos del sismólogo muestran que la primera onda acústica, después de viajar siguiendo el trayecto más corto entre Tonga y los Pirineos, llegó a la estación sísmica cerca de las 20:00 UTC, es decir, casi 16 horas después de la explosión. Unas cuatro horas después, se registró la llegada de la onda acústica que había recorrido el globo en dirección contraria, siguiendo pues un trayecto más largo. La velocidad de propagación de las ondas se estima en unos 1100 km/h.
Seismic and infrasound phases of the #HungaTongaHungaHaapai volcanic event arriving at the @labsubcanfranc seismic station (Central Pyrenees) separated by + 14 hours. @GEO3BCN_CSIC pic.twitter.com/uCuNK42jHQ
— Jordi Diaz Cusi (@JDiazCusi) January 17, 2022
“El punto de mayor interés es que los datos obtenidos en el LSC permiten identificar claramente la llegada, unas 36 horas más tarde, del segundo paso de estas ondas después de haber circunvalado nuevamente la Tierra y viajado uno total de 57.000 km sin llegar a atenuarse”, explica Díaz. “Este hecho puede considerarse excepcional para una onda acústica registrada por un sensor sísmico y pone de manifiesto la gran energía del evento, estimada en unos 10 megatones por la NASA”, añade el investigador de GEO3BCN-CSIC.
Acoustic waves from the #HungaTongaHungaHaapai volcanic explosion circling the earth twice, recorded SEISMICALLY at the @labsubcanfranc site in the Central Pyrenees two days after the event.
— Jordi Diaz Cusi (@JDiazCusi) January 18, 2022
Nice example of acoustic/ground shaking coupling!! pic.twitter.com/7BHeasfXlT
Las ondas generado por la explosión volcánica, con frecuencias no detectables por el oído humano, se ha identificado en redes sísmicas del mundo, tales como las Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya (ICGC), explica Díaz. Sin embargo, la observación del segundo paso de las ondas solo es posible en estaciones sísmicas con un nivel de ruido muy bajo, como la ubicada en Canfranc.
Les ones acustiques generades per l'explosió volcànica a #Tonga, enregistrades a la xarxa sísmica del @ICGCat pic.twitter.com/mgOS1EpdCl
— Jordi Diaz Cusi (@JDiazCusi) January 17, 2022
Análisis completo del invesitgador Jordi Díaz en la web del CSIC